lunes, 27 de diciembre de 2010

La pura apariencia.



Fuente: http://daimiel.cuadernosciudadanos.net/totem/2010/12/27/la-pura-apariencia-hoja-del-diario-no-29

El primo de Zapatero, el señor Luis Arroyo, a la sazón presidente del Patronato del Parque Nacional de Las Tablas, ese que no ha abierto el pico con el boicoteo del acto de botadura de la barca ni con el numerito del pase de modelos en este espacio protegido, gusta mucho de asomarse a los medios para decir lo bien que están ahora Las Tablas, cuántas aves han nidificado esta primavera y qué censo tan espectacular puede exhibirse en estos meses. Porque ya saben, la naturaleza, básicamente, y no la gestión política, ha propiciado que este humedal se encuentre nuevamente cerca de los máximos de inundación cuando acaba de terminar el otoño y, claro está, las previsiones menos optimistas ya auguran otro año espectacular.
Pero el primo de Zapatero, el señor Arroyo, en la noticia difundida hoy en la que nos cuenta todas estas buenas nuevas, y de la cual se hacen eco muchos medios, también ha soltado una perla que demuestra lo que le importa la apariencia, ¡ muchísimo !, y lo que le importa la realidad, ¡ bastante menos !, o si no lean la información de la agencia EFE:
"El buen momento hídrico en el parque como consecuencia del nuevo episodio de lluvias, ha dicho Luis Arroyo, ha hecho posible que se abran las compuertas del Molino de Molemocho, por lo que el agua asciende hacia el Molino de Griñón en lo que se conoce popularmente como Guadiana remontante.
Arroyo ha comentado que el agua procedente del río Azuer avanza y se encuentra en el cauce del Guadiana próximo al Molino de Griñón, lo que podría provocar que se uniera al agua del Guadiana remontante, recuperando la imagen del parque recibiendo agua tanto del río Gigüela como del río Guadiana."
Vamos a ver, si el agua del Azuer necesita, para llegar a Las Tablas, unirse al agua soltada en la presa de Molemocho, la imagen del parque recibiendo agua tanto del rio Cigüela como del río Guadiana sería una imagen falsa porque, como queda claro, Las Tablas, en ese caso, no recibirían agua del Guadiana sino que, al revés, se la estarían dando al propio Guadiana incapaz todavía de aportar al parque. Y por lo tanto se ve claro que lo que le interesa es esa apariencia de normalidad, la foto nada más, el trampantojo para hacer creer lo que no es.
La normalidad es otra cosa, eso está claro, y esa normalidad es justo lo que ansiamos los que queremos que se recupere el acuífero, y el dominio público de los rios, que se restauren las riberas. Normalidad a espuertas, normalidad fetén, normalidad que no dan dos inviernos abundantes de lluvia sino otras muchas acciones de gran calado para cambiar esta inercia degradadora, esquilmadora, criminal. Pero el primo de Zapatero todavía no ha entendido ésto porque ni conoció el Guadiana manchego anterior a los años 70 ni puede despegarse del carácter político que le aupó a ese cargo.
El Guadiana remontante es una anormalidad, y eso, por insólito que resulte, lo comprende hasta el más garrulo y retrata las barbaridades políticas que inflingieron al río. Contar pues con esa corriente anómala para aparentar normalidad es, incluso, hasta un insulto a la inteligencia, incluida la suya.
Nota: Dejo aquí el enlace a la noticia comentada, positiva en otros aspectos:

http://www.efeverde.com/esl/contenidos/noticias/26-diciembre-2010-15-04-00-las-tablas-de-daimiel-acaban-el-ano-con-mas-de-1.400-hectareas-inundadas

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