Así lo ha explicado hoy a Efe el presidente de la CHG, Eduardo Alvarado, quien ha asegurado que tanto el pantano de Peñarroya, en Argamasilla de Alba, como el embalse de Puerto Vallehermoso, en La Solana, podrían superar el cien por cien de mayor capacidad de embalse, siempre, dependiendo del volumen de lluvia que caiga y la intensidad.
Ha dicho que el pantano de Peñarroya, cuya tipología constructiva es de labio fijo, podría dejar desembalsar agua en el momento que alcance su máximo nivel, que hace unos días se aproximaba ya al 96 por ciento de su mayor capacidad que son 50,3 hectómetros cúbicos.
En los últimos siete días este pantano registró un incremento de 1,2 hectómetros cúbicos y almacenando ya 48 hectómetros cúbicos, gracias a las aportaciones que estaba recibiendo del agua procedente de Las Lagunas de Ruidera, tramo en el cual el Guadiana, en los últimos meses no ha dejado correr.
Las precipitaciones registradas en la cabecera de la cuenca hidrográfica del Guadiana y el hecho de que las lluvias de otoño se hayan concentrado en la zona este de Ciudad Real, según Alvarado, está favoreciendo el llenado de este embalse, de capacidad media.
Ha recordado que la última vez que este pantano desembalsó agua fue el año pasado y ha calificado esta circunstancia como positiva por la influencia que tendrá en la mejora de los niveles hídricos del acuífero 23.
El presidente de la CHG ha puntualizado que el hecho de que pueda verter agua el embalse de Peñarroya en estos momentos no debe hacer olvidar la situación de sobreexplotación de este acuífero, así como el largo período de sequía que se viene registrando en la cuenca hidrográfica.
Asimismo, ha subrayado que, en ningún caso, nadie puede decir que este hecho puntual "resuelve los problemas" de falta de recursos hídricos en la zona.
Alvarado ha comentado que, en el caso del embalse de Puerto Vallehermoso, al tratarse de un embalse pequeño, que puede almacenar 6,9 hectómetros cúbicos, y dado que se encuentra ya al 76,3 por ciento de su capacidad con 5,3 hectómetros cúbicos, es más que probable que se tengan que producir desembalses.
En este sentido, ha dicho que los técnicos de la CHG están vigilantes para proceder a realizar estos desembalses "con cautela" en función de la situación que se vaya registrando.
Ha dicho que el pantano de Peñarroya, cuya tipología constructiva es de labio fijo, podría dejar desembalsar agua en el momento que alcance su máximo nivel, que hace unos días se aproximaba ya al 96 por ciento de su mayor capacidad que son 50,3 hectómetros cúbicos.
En los últimos siete días este pantano registró un incremento de 1,2 hectómetros cúbicos y almacenando ya 48 hectómetros cúbicos, gracias a las aportaciones que estaba recibiendo del agua procedente de Las Lagunas de Ruidera, tramo en el cual el Guadiana, en los últimos meses no ha dejado correr.
Las precipitaciones registradas en la cabecera de la cuenca hidrográfica del Guadiana y el hecho de que las lluvias de otoño se hayan concentrado en la zona este de Ciudad Real, según Alvarado, está favoreciendo el llenado de este embalse, de capacidad media.
Ha recordado que la última vez que este pantano desembalsó agua fue el año pasado y ha calificado esta circunstancia como positiva por la influencia que tendrá en la mejora de los niveles hídricos del acuífero 23.
El presidente de la CHG ha puntualizado que el hecho de que pueda verter agua el embalse de Peñarroya en estos momentos no debe hacer olvidar la situación de sobreexplotación de este acuífero, así como el largo período de sequía que se viene registrando en la cuenca hidrográfica.
Asimismo, ha subrayado que, en ningún caso, nadie puede decir que este hecho puntual "resuelve los problemas" de falta de recursos hídricos en la zona.
Alvarado ha comentado que, en el caso del embalse de Puerto Vallehermoso, al tratarse de un embalse pequeño, que puede almacenar 6,9 hectómetros cúbicos, y dado que se encuentra ya al 76,3 por ciento de su capacidad con 5,3 hectómetros cúbicos, es más que probable que se tengan que producir desembalses.
En este sentido, ha dicho que los técnicos de la CHG están vigilantes para proceder a realizar estos desembalses "con cautela" en función de la situación que se vaya registrando.
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